Te invito a Emociones con Patas
Te invito a que entres… hasta la cocina.
Te invito a que me leas… en diagonal, horizontal o sólo 5 palabras.
Te invito a que pienses más allá de lo que tú mismo te dejas.
Te invito a que mires… con otras gafas.
Te invito a que sientas… aunque duela.
Te invito a conocerme… a pesar de que no me conozcas.
Te invito a debatir… sin faltar el respeto.
Te invito a emocionarte… hasta que tus ojos se llenen de lágrimas.
Te invito a un café… porque me encanta ese momento.
Te invito… porque tu compañía me hará crecer.
Te invito a crecer… aunque eso para muchos implique olvidar ser un niño.
Te invito a recordar… un olor de un familiar, a tararear aquél estribillo que te hacía ponerte en pie y saltar como un loco en tu habitación o recitar “Caminante no hay Camino, pues se hace el Camino al andar”.
Te invito, porque invitar es incitar a estimular a alguien a hacer algo. No pretendo ser el gurú de las emociones, pero de eso va Emociones con Patas. De sentir las emociones, ponerles palabras, hablar de ellas y entenderlas. Intentar gestionarlas, con todo el barullo del día, para disfrutar de ellas, pues incluso en los peores momentos, siempre hay algo que aprender.
Te invito a que salgas de vez en cuando de tu zona de confort.
Pero sobre todo, te invito a que no tengas MIEDO, porque gracias a eso, doy la bienvenida a EMOCIONES CON PATAS, porque las emociones aunque no lo creas, son seres que debemos trabajar, para que no se enquisten.
Espero de todo corazón que disfrutes tanto leyéndolo como yo escribiéndolo.
Tenemos mucho tiempo por delante.
Acepto la invitación y espero ansiosa tus reflexiones, pues creo que el conocer, saber identificar y explicar las emociones es tan necesario para cualquier persona como respirar. ¡Enhorabuena por tu gran cambio! Te deseo todo lo mejor.
Muchas gracias Belén! Totalmente de acuerdo en que explicar las emociones es como respirar! pero cómo nos cuesta a los adultos…
¿Te quieres creer que me he querido leer las descripciones que haces en cada apartado antes de empezar por esta invitación a tu blog, y me tienes, hace rato, con la lagrima asomando y con la piel de gallina por momentos? ¡Qué bonita eres, pequeña! Y qué orgullosa estoy de ti.
De eso trata Emociones con Patas, de emocionarse, de dejarse llevar y sentir sin límites! Muchas gracias Eu!